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Sant Rafel y Esporles se esforzaron al máximo para ganar, pero la igualada premió su juego, valentía y trabajo en un choque jugado con un calor insufrible Juanfran marcó el gol de la victoria en la primera jornada y también ayer el del valioso empate

Sant Rafel y Esporles jugaron ayer para ganar, pero el empate premió justamente a dos equipos que se emplearon a fondo desde que empezó el partido hasta que acabó. Los jugadores acabaron fundidos por el calor que hacía, pero también por el gran esfuerzo físico que hicieron en un choque en el que ambos conjuntos jugaron a un nivel altísimo, especialmente en la primera parte, en la que salieron a jugar y a ganar. Sin especular. A por todas.

Los dos equipos fueron valientes desde que empezó a rodar el balón y trabajaron y corrieron para tener el esférico. Fue un toma y daca al que solo faltó profundidad ofensiva, pero a pesar de ello el Sant Rafel pudo marcar a través de Juanfran en el minuto 20; de Franco, que disparó al larguero en el 43 y de Roberto, que remató fuera a la media vuelta en el 45.

Sin embargo, en la siguiente jugada, ya en el descuento, el Sant Rafel falló en despeje y un centro visitante desde la banda derecha se convirtió en el 0-1 ´gracias´ a Baena, que desvió el esférico al fondo de la portería. El tanto llegó en el peor momento y de forma injusta porque el Sant Rafel se esforzó y desgastó más.

A partir de este momento, el Esporles estiró sus líneas y llegó con cierto peligro a las inmediaciones del área pitiusa, pero Hortal estuvo muy acertado.

Al final, empate y el reconocimiento del público al esfuerzo que hicieron todos los futbolistas en una tarde en la que el calor no fue capaz de fundir el espíritu combativo y creativo de estos dos equipos, que más que luchar por la zona media, parecía que se jugaban una plaza en el play-off.

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