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Los dirigidos por Antonio Vadillo afrontan este domingo el segundo partido de cuartos de final ante el Osasuna Magna. Una victoria en Anaitasuna clasificaría al equipo para semifinales. Piqueras, única baja.

El Illes Balears Palma Futsal afronta este domingo el segundo partido de los cuartos de final del playoff por el título con la oportunidad de cerrar la eliminatoria y acceder a las semifinales. Tras una trabajada victoria en Son Moix en el primer duelo (2-1), el conjunto mallorquín vuelve a medirse este domingo al Osasuna Magna (12:00 horas / FEF TV), esta vez en el Pabellón Anaitasuna, con el objetivo de hacer valer el primer punto conquistado y evitar un tercer partido.

Los de Antonio Vadillo llegan reforzados anímicamente tras imponerse en un duelo que no se resolvió hasta los últimos segundos y en el que Rivillos desató la euforia con un gol salvador que premió el dominio del equipo durante gran parte del encuentro. Ganar en Pamplona permitiría cerrar la eliminatoria por la vía rápida, asegurar el pase a semifinales y, además, disponer de más días de descanso y preparación antes de la siguiente ronda en esta fase decisiva del campeonato.

Anaitasuna no es una pista sencilla y el equipo lo sabe bien. El pasado mes de mayo, pocos días después de proclamarse campeón de Europa, el Illes Balears Palma Futsal cayó 6-4 en el feudo navarro en el primer partido liguero tras la UEFA Futsal Champions League. Aquel día, el equipo llegó sin apenas entrenamientos y con el desgaste físico y emocional del título aún presente. Ahora, en cambio, el equipo se encuentra en otra dinámica, con toda la plantilla disponible —salvo Piqueras, baja por lesión— y ya recuperados para afrontar este tramo decisivo del curso.

El vestuario es consciente de lo que hay en juego. Ganar este domingo en Pamplona permitiría cerrar la serie por la vía rápida, certificar el pase a semifinales por octava vez en su historia y seguir avanzando en la lucha por el título