Según fuentes próximas a la investigación del caso a las que ha tenido acceso Ultima Hora el acusado es un viejo conocido de la policÃa por graves altercados anteriores, peleas, agresiones, insultos y vinculación a grupos ultras radicales. En uno de sus múltiples incidentes deportivos, agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana detectaron comportamientos antideportivos y procedieron a levantar un acta de propuesta de sanción por incumplimiento a la Ley del Deporte.
DÃas después, se le notificó al interesado una multa económica y una orden de prohibición de acceso a cualquier recinto deportivo. Resulta que, el domingo dÃa 5 de febrero de 2023, durante la disputa del partido entre el Real Mallorca y el Real Madrid en el estadio de Son Moix, el jefe de seguridad del equipo blanco detectó la presencia de dicho ultra. Tras comunicarlo al jefe de Seguridad del equipo bermellón y al máximo responsable del Cuerpo Nacional de PolicÃa, varios agentes no tardaron en dar con la ubicación del sospechoso y proceder a su identificación.
Nada más verlo, ya le hicieron saber que no podÃa estar en esas instalaciones dado que era conocedor de que tenÃa una prohibición para poder asistir a eventos deportivos por su comportamiento antideportivo anterior. Tras expulsarlo del recinto se le comunicó que volverÃa a ser propuesto para sanción. Hace unos dÃas, se hizo pública la resolución que fija en 30.000 euros de multa y dos años sin poder pisar un estadio.
Este ultra ya estuvo involucrado el pasado 5 de mayo de 2021 en el exterior del estadio de Son Moix en un incidente violento. La vÃctima se encontraba trabajando como vigilante de seguridad con motivo de la celebración del partido de la Liga de Fútbol Profesional entre el Real Mallorca y el Sporting de Gijón. El trabajador tuvo que intervenir en un altercado protagonizado entre varios aficionados del club bermellón a las afueras del estadio y recibió una fuerte patada.
EL APUNTE
El jefe de seguridad del Real Madrid detectó al ultra y alertó a la policÃa