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No lleva ni una semana al frente de la Federación Española de Fútbol y Luis Rubiales, elegido el pasado jueves en la Asamblea General como nuevo presidente, ha comenzado a tomar decisiones para formar su equipo de gobierno para estos dos años de mandato. Este lunes, pasadas las 15:30 de la tarde ha nombrado al presidente de la Federación de Fútbol de les Illes Balears (FFIB), Miquel Bestard, como nuevo vicepresidente.

Esta decisión no es casualidad. Bestard es un profundo conocedor del fútbol base, al que ha dedicado toda su vida, primero como entrenador y posteriormente desde el mando de la federación territorial insular. Uno de los objetivos de Rubiales expuestos durante su campaña electoral y recalcados en su discurso de proclamación era el de potenciar el fútbol base. En palabras del nuevo presidente, el fútbol base es (valga el juego de palabras) «la base de nuestro fútbol» y por ello «hay que darle mucho más». Por ello ha decidido rodearse de un profundo conocedor de los problemas que arrastra el fútbol amateur en los últimos años.

En unas primeras declaraciones a IUSPORT, Bestard ha mostrado su sorpresa positiva por el nombramiento: «Tendremos un periodo breve para trabajar, pero intentaremos ayudar lo máximo posible al fútbol ‘amateur’, que es lo que yo he conocido bien durante todos estos años». No obstante, Bestard ejercerá las funciones que le sean atribuidas desde su despacho en Mallorca, como viene haciendo hasta ahora para el fútbol en Baleares.

Pese a mostrarse como un defensor de Ángel María Villar, en los últimos meses, Miquel Bestard había expresado ante los medios de comunicación la necesidad de una regeneración en la federación y, sobre todo, un proyecto de unidad. Así lo recalcó en su mensaje de felicitación dedicado a Rubiales el pasado jueves tras conocerse al nuevo presidente: «La unidad nos hace más fuertes y me consta que el nuevo presidente está por la labor».

El trabajo de Bestard al frente de la Federación Balear está fuera de toda duda. En octubre de 2004, Bestard fue elegido por la mayoría de los asambleístas como nuevo presidente de la Balear y ha sido reelegido hasta en tres ocasiones. La última, en 2016. Uno de los logros que más se le agradecen al dirigente mallorquín es la organización de varios partidos de la selección española absoluta en el estadio de Son Moix. Pero no son los únicos.

Sus últimos logros están en conseguir traer a Mallorca la final de la Copa del Rey de Juveniles en junio de 2016. También en noviembre del año pasado la selección española femenina de Jorge Vilda disputó en Son Moix uno de los partidos de clasificación para el Mundial de Francia de 2019 contra Austria, a quienes golearon por 4-0.

Rubiales dijo que «nadie nos ganará en trabajo». Y parece que se ha tomado en serio esta promesa. El nuevo presidente ya ha comenzado a tomar decisiones para construir desde los cimientos la nueva RFEF. De momento, la casa del fútbol español ya tiene nuevo vicepresidente.

IUSPORT