Formentera: La isla del milagro copero

4 diciembre 2017 | Por lorenzo | Categoria: FĂștbol Regional

Pablo Sierra del Sol/mundodeportivo.com Álvaro Muñiz es un niño de casi treinta años que ha recibido antes de tiempo un regalo anticipado de Navidad. Sopla un viento frĂ­o y hĂșmedo en Sant Francesc Xavier, el pueblo mĂĄs grande de la isla mĂĄs pequeña de Baleares, y Álvaro, que juega de centrocampista en la Sociedad Deportiva Formentera, se pasea por una plaza donde hay diez mesas casi desiertas en la terraza de un bar, cuatro banderas ondeando en el balcĂłn del Consell Insular y una iglesia enorme con la fachada totalmente pintada de blanco.

El futbolista lleva en una bolsa una pelota llena de firmas. Las de sus diecisĂ©is compañeros. Saca el cuero y lo sujeta con cuidado, para no emborronarlo con la tinta, que aĂșn estĂĄ fresca. No han pasado, en el momento de escribir estas lĂ­neas, ni 48 horas desde que su cabeza rematĂł esa misma bola al fondo de la red de una de las porterĂ­as de San MamĂ©s Barria.

El Formentera, un modesto de Segunda B, echaba en el Ășltimo suspiro de la eliminatoria de dieciseisavos de final al Athletic Club. “Un poco mĂĄs y no me dejan irme con el balĂłn, pero a mĂ­ nadie me podĂ­a quitar este recuerdo. Cuando vea a mis padres les voy a dar la pelota para que la pongan en casa en el sitio que quieran”.

Álvaro es uno de esos jugadores anĂłnimos que se han curtido en el fĂștbol modesto de España. Nacido en GijĂłn y criado en Cartagena, ha pasado por equipos asturianos, murcianos, canarios y castellanos antes de recalar este verano en un Formentera debutante en Segunda B. Para Ă©l, “las botas y la maleta siempre han ido de la mano” y, “aunque el fĂștbol suele dar mĂĄs penas que alegrĂ­as, eliminar a un Primera DivisiĂłn en la Copa del Rey lo compensa todo”. AsĂ­ describe el autor del gol mĂĄs importante en los 46 años de historia del modesto club pitiuso la felicidad que se notaba, bajo la resaca y el cansancio, en las caras de sus compañeros cuando llegaron a la isla.

En esta plantilla que ahora reclama la atenciĂłn del fĂștbol español (sobre todo porque el sorteo de octavos de este martes podrĂ­a cruzarles con Barça, Real Madrid, AtlĂ©tico o Valencia) hay veteranos que han llegado a jugar en Primera -como Joseba Garmendia, en el Athletic, o Samuel San JosĂ©, en el Racing de Santander-, talento de la Masia que no debutĂł con el primer equipo -como Nando Quesada-, jĂłvenes que vienen con hambre -como AdriĂĄn Riera o Kingsley Fobi, un potente lateral derecho, ghanĂ©s y propiedad del Udinese de los Pozzo, que se ha lesionado de larga duraciĂłn- y, sobre todo, mucho jornalero del balompiĂ© que estĂĄ viviendo “los dĂ­as mĂĄs felices” de su vida futbolĂ­stica, como dice Juan Antonio, el pichichi del Formentera.

El mĂ­ster tambiĂ©n saborea el momento dulce, aunque pide a sus futbolistas que no se despisten en la Liga. Eso sĂ­, Tito GarcĂ­a SanjuĂĄn concede al grupo un Ășltimo capricho: un baño en el Ășnico spa que funciona en la isla durante el invierno. Uno de los jugadores que se zambulle es Marcos Contreras, portero y capitĂĄn, un sevillano que se ha asentado perfectamente en este microcosmos de 83 kilĂłmetros cuadrados y 12.000 habitantes, que se masifica de turistas en verano y se queda casi vacĂ­o cuando baja el termĂłmetro. “Ver la sonrisa en la cara de tus vecinos y saber que tĂș has formado parte de su alegrĂ­a es algo que no se puede explicar”, dice Marcos, que vino a Formentera en 2011, cuando el equipo estaba en Regional, y ha vivido aquĂ­ dos ascensos, ha sido hĂ©roe en varias tandas de penaltis coperas y ya jugĂł el año pasado contra el Sevilla.

Ante el Athletic, y a la desesperada, subiĂł a rematar el cĂłrner que acabĂł en el gol del milagro. Mientras cruzaba San MamĂ©s, Marcos fue diciĂ©ndole a sus compañeros, incluido Álvaro, que en esa jugaba ganaban el partido. Lo habĂ­a soñado la noche antes. “Al final va a parecer que trabajo en Stranger Things, pero no [rĂ­e]. Solo tuve la intuiciĂłn de que Ă­bamos a meter un gol en el Ășltimo minuto porque, como tĂ©cnica mental, visualizo posibles jugadas que se pueden producir en el siguiente partido”. Sus lĂĄgrimas mientras alzaba los guantes arrodillado sobre el cĂ©sped de Bilbao ya forman parte del ĂĄlbum donde se guardan las hazañas de los modestos que, pese al formato de ida y vuelta, siguen atreviĂ©ndose a soñar cuando llega la Copa. ÂżY ahora, quĂ©? Marcos es claro: “OjalĂĄ toque Barça o Madrid. Yo preferĂ­a al Betis, pero ya no puede ser, asĂ­ que, por lo menos, la gente que nos anima cada domingo se lleve un alegrĂłn”. Este martes conocerĂĄn a su prĂłximo rival en los octavos de fina.

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