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El baloncesto de élite vuelve a Palma siete años después del último Pama Aqua Màgica – Burgos jugado en el ‘Palma Arena’. Un partido que cerraba de forma matemática la salvación del PAM pero que a su vez suponía el epitafio deportivo del que hasta el momento ha sido el último proyecto ilusionante de baloncesto profesional en la capital balear. Ahora, el relevo lo coge el Club Bahía San Agustín, aunque entre ambas historias no hay actualmente paralelismos.

►¿A la tercera va la vencida?. Tras un primer intento tan ilusionante como irreal – el del Syrius Patronato – en la década de los 90, sustentado más en la dinámica deportiva que en unos fundamentos reales, llegó a mediados del 2000 el segundo boceto de lo que tenía que ser un proyecto ACB.

Conseguida su plaza por méritos deportivos, el Alcúdia-Aracena aterrizó en Palma bajo la denominación de Palma Aqua Màgica. Un proyecto que duró tres temporadas, la última de ellas lastrada por los problemas económicos y un viraje a nivel gubernamental que dejó con las posaderas al aire al club, sobretodo a nivel de lo que tenía que ser el sustento a nivel económico de la entidad palmesana: el Palma Playa Park de Ses Fontanelles. A todo ello, el ‘cap de fiblo’ que arrasó el polideportivo de ‘Son Moix’, dejando impracticable -entre otras ubicaciones- la cancha de baloncesto, condeno a la definitiva desaparición al Palma Aqua Màgica.

►Y de las cenizas del PAM al actúal Palma. El conjunto filial del PAM, el Palma Playa Park -que militaba en categoría EBA- recogió el testigo del famélico baloncesto de Ciutat. Un equipo que bajo esa denominación comercial estaba el Bahía San Agustín. Y su presidente, Guiem Boscana a la cabeza. Un gestor que gracias a su sentido de la coherencia y seriedad a la hora de afrontar diferentes situaciones tanto deportivas como económicas que se ha encontrado por el camino, ha tomado en su momento las decisiones que más han interesado al equipo, anteponiendo la viabilidad del club por encima de otros postureos o derechos a salir en la foto.

De esta forma, con el actúal Palma Air Europa que por méritos propios jugará la próxima temporada en la LEB Oro, cabe esperar que no se vuelvan a repetir los errores que en etapas anteriores han condenado al fracaso a todo proyecto deportivo de enraizar un equipo de élite en la capital balear. Quizás, a la tercera vaya al fín la vencida.

Texto y fotos: Bàsquetbalear.com