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El descarte de Iñigo Pérez ha provocado una semana agitada sondeado en mercado, sobre todo de Primera, para acomodarle como cedido. Aunque se ha barajado otras opciones, el Mallorca, recién descendido a Segunda, es el que más ha apostado por la calidad del 17 rojiblanco, que sigue entrenándose en Lezama. El equipo de Oltrá será su destino, salvo un giro inesperado.

La operación se fraguó en la tarde del viernes entre el despacho que representa al centrocampista y Serra Ferrer, director general balear. El Mallorca será, si alcanzan un acuerdo satisfactorio ambas entidades en el reparto de la ficha del jugador, el equipo de Iñigo Pérez para esta campaña, según ha podido saber El Desmarque Bizkaia. Un Mallorca que aspira a ascender de nuevo a Primera tras su accidentada última campaña. Su técnico, José Luis Oltrá, ha declarado que necesita apuntalar el esqueleto del equipo: “Creo que debe venir algún futbolista más porque esto es muy largo y hay que tener un bloque compensado y competitivo. La dirección deportiva esté trabajando muchísimo, y aún se pueden dar salidas y entradas. La plantilla a día de hoy es muy corta”. Allí se topará con Joao Víctor, Martí, Pereira y Thomas como compañeros de la medular. Valladolid y Alavés se habían interesado por el mediocentro, sobre todo el club babazorro, que se ha decepcionado por la determinación del jugador de marcharse cedido a las islas, una decisión personal. El hecho de que se sume además al asunto de Albizua, aún sin ejecutar con el Athletic, ha enfadado a su director deportivo, Javier Zubillaga. La apuesta por Erik Morán y el fichaje de Mikel Rico han aparcado al bravo volante pamplonica en Bilbao. Los agentes de Iñigo habían solicitado la posibilidad de recalar en varios clubs de la máxima categoría: Villarreal, que ya le quiso para su filial de Segunda hace tres temporadas y manejó una oferta por tres temporadas, Osasuna, que no piensa ampliar su nómina, Levante y Rayo Vallecano. Iñigo Pérez, de 25 años, siempre se ha repuesto de los reveses. En su día le costó asentarse en el filial y descendió al Basconia, después se tuvo que adaptar al lateral izquierdo, se ganó ficha con el primer equipo a pulso y Bielsa lo orilló al Campo 7. Perseveró e hizo doblegar la cintura del técnico rosarino. La lesión grave del curso pasado en el tobillo le mantuvo toda la temporada en blanco, entre tratamientos conservadores y la operación. Ahora necesita continuidad y Valverde no se la puede ofrecer. Acaba contrato en 2015, y anhela activar sus famosas faltas escoradas a las bandas, que bien podría ser en Palma.
Fuente eldesmarque de Bizcaya