Denuncia de unos padres al entrenador de su hijo (C.D.Ferriolense)

19 abril 2016 | Por lorenzo | Categoria: FĂștbol Regional

FUTBOL BASELos hechos sucedieron el pasado dĂ­a 6/02/2016 en el vestuario, tras el partido entre los Cadetes de 1ÂȘ. Regional (Grupo A) del C.D. Ferriolense (Equipo al que yo pertenezco) y el U.D. Arenal. El partido empezĂł a las 19:45 Hrs.

Me encontraba con mi equipo al final del partido ya en el vestuario del campo del Arenal cuando hablaba con un compañero de equipo y le explicaba a un compañero mi versiĂłn del porque habĂ­amos perdido tal partido (2-1). Le ponĂ­a ejemplos como”CorrĂ­an mĂĄs que nosotros” “le ponĂ­an mĂĄs intensidad”” perdĂ­amos muchos balones en el centro del campo” y al final de esta autocrĂ­tica añadĂ­ que nuestro cuerpo tĂ©cnico en especial el entrenador dentro del terreno de juego no dirigĂ­a ni decĂ­a nada pero que al descanso nos decĂ­a de todo como por ejemplo”Niñatos de mierda, cabrones, etc”

En ese momento, el delegado A.M.A, que se encontraba en el interior del vestuario, oyó lo que yo decia y me lo recriminó, a lo que yo le respondí ” Calla 
.., no quiero hablar”.

Él saliĂł del vestuario i de repente entrĂł el entrenador (M.N.M) y se me encarĂł, acercando su rostro al mĂ­o y diciĂ©ndome “¿QuĂ© problema tienes con los entrenadores?” en tono agresivo y a la vez me empujĂł unos 3 o 4 veces hacia atrĂĄs mientras yo no hacia nada ni decĂ­a nada, y en una de esas me cogiĂł con su mano derecha del cuello y yo se la apartĂ© y rĂĄpidamente el Delegado del equipo A.M.A y el segundo entrenador J.M.P.M le apartaron de mi y mientras el forcejeaba para que le soltaran, me iba insultanto, llamĂĄndome “Hijo de la gran puta, cabronazo, niñato de mierda” mientras esto ocurrĂ­a, yo me dirigĂ­ a la ducha de los vestuarios y Ă©l, que habĂ­a conseguido que le soltaran, se me volviĂł a encarar a lo que yo seguĂ­ hacia delante y Ă©l me seguĂ­a diciendo “Que no tenia ni puta idea de fĂștbol etc” y yo le respondĂ­a “ SĂ­, SĂ­ “ para no darle mĂĄs caña y que me dejara en paz.

Al ver que yo no le hacía ni caso, salió del vestuario y yo me duché, me vestí y salí.

Dos días después de estos hechos, (martes 08/02/2016) en el entrenamiento (De 20:30 a 22:00 Hrs. aprox) el entrenador se dirigió a mi y me pidió disculpas por lo sucedido y me dijo que tenía que ir a hablar con el Presidente y el Coordinador.

Fui a hablar con ellos pensando que querĂ­an oir mi versiĂłn de los hechos pero no fue asĂ­, se limitaron a darme un ultimatum para que mejorara mi comportamiento, indicĂĄndome que, segĂșn el entrenador, lo ocurrido habĂ­a sido “la gota que colmĂł el vaso de su paciencia” y que yo le faltaba al respeto.

Yo les dije que en ningĂșn momento usĂ© ninguna palabra ofensiva hacia el entrenador y que el dĂ­a de los hechos, yo simplemente comentaba con un compañero mi opiniĂłn de como estĂĄbamos planteando los partidos y que a mi personalmente no me gustaban, no siquiera se lo dije a Ă©l personalmente.

Después de todo esto pasaron unas semanas en las que se disminuyeron considerablemente mis minutos de juego con el equipo, incluso en alguno de los partidos ni siquiera se me convocó, lo cual provocó una gran decepción en mi y una sensación de impotencia que no entendía.

Mis padres pidieron una reunión con el Coordinador para que les explicase el motivo del porqué, tras los graves hechos ocurridos, el castigado había sido yo y no el propio entrenador que había sido el que había usado la agresión.

Mis padres y yo fuimos a la reuniĂłn y allĂ­ estaban el Coordinador y el entrenador y mi padre pidiĂł una explicaciĂłn y una soluciĂłn al problema y la Ășnica respuesta que tuvo fue que tanto la Directiva como el Equipo TĂ©cnico habĂ­an decidido “apartar a Marc del equipo”.

Me quedĂ© estupefacto al ver que la Ășnica persona que salĂ­a perdiendo en todo este lĂ­o, era yo.

Posteriormente mi madre pidiĂł una reuniĂłn con el Presidente del Club y la respuesta que obtuvo fue prĂĄcticamente que, se me daba la baja del equipo y que el entrenador seguĂ­a allĂ­ entrenando como si nada porque como pidiĂł disculpas, se olvidaba todo. Que les sabĂ­a muy mal lo ocurrido pero que no podĂ­an hacer nada mĂĄs.

A fecha de hoy, mis sentimientos son que, la persona agredida fui yo y la persona perjudicada con la expulsión también he sido yo, mientras que el entrenador, no ha recibido castigo alguno por su agresión o intento de agresión a un menor.

Biel Sampol y Cati Llull

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