Sports De Ca Nostra

Si has hablado con dieciocho entrenadores de diez países diferentes, siete de ellos con experiencia en Primera División, tres en la Champions y terminas por quedarte con Ferrer, tienes un problema. Sin contar que ser amigo de Miquel Angel Nadal representa un valor añadido, si no definitivo. Por eso fue elegido Miquel Soler en mala hora. Se supone que a los diecisiete descartados les pagarían el viaje y las dietas, al menos por las molestias. Pero no por ello vamos a negarle el pan y la sal al recién llegado, que no es culpable de nada de eso.

Hemos cambiado al Nanu por el Xapi, ¿o es Chapi? Bueno, da lo mismo. Probablemente no es el técnico que más le hubiera gustado a la afición, siempre representada por el incombustible Toni ‘Tatxa’ ¿o es ‘Tacha’?, pero nunca llueve a gusto de todos y menos en lo que concierne a fichajes.

El currículum del nuevo jefe del vestuario es breve. Empezó su carrera hace casi cinco años en la Liga holandesa, con el Vitesse, donde no logró renovar pese a salvar la categoría. Después de tres años sin equipo aterrizó en Córdoba, al que ascendió. Sin embargo sólo se mantuvo ocho jornadas en la división de honor antes de ser relevado de su cargo. En fin, lo bueno, si breve, dos veces bueno.

Atesora, como cualquier otro que ocupara el banquillo de Son Moix, el beneficio de la duda. Lo contrario sería absurdo. Todos los partidos empiezan cero a cero, lo importante es cómo acaban. Y, hablando de cuestiones de calado, el éxito de su trabajo dependerá en gran medida del material humano que el club ponga a sus órdenes. Por muchas excepciones ejemplares que se pongan sobre la mesa, lo que manda es el dinero. «Enséñame la pasta», como decía Jerry Maguire.

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