Sports De Ca Nostra

No se trataba de un partido más, no era un encuentro de trámite. El domingo 16 estaba marcado en el calendario de Murcia Cobras y de Mallorca Voltors como el día en el que se tenía que decidir qué equipo se iba a quedar el liderato del grupo Sur de la Serie B de la Liga Nacional de Fútbol Americano. La victoria en Murcia (12-26) mantiene a Voltors líder y como único equipo imbatido, por lo que, de acabar así la fase regular, tendría el factor campo en los play-offs (que se juegan a partido único) de ascenso.

Los locales se presentaron en la Vieja Condomina con una plantilla muy numerosa dispuesta a darlo todo para acabar con la hegemonía de Voltors en el grupo. La escuadra mallorquina llegó a Murcia escasa de efectivos, con posiciones muy debilitadas, especialmente en las líneas de ataque y de defensa. Ante un examen de una oposición, sin haber estudiado y sin haberse preparado el temario, presentarse a la convocatoria es un acto de entrega a la diosa fortuna que generalmente termina en un fracaso estrepitoso. Por este motivo, el cuerpo técnico de Mallorca Voltors, encabezado por Isaac Delgado y su asistente Andrés Gelabert, preparó a conciencia el encuentro ante Cobras que no era otra cosa que una oposición para optar a ser el mejor equipo del grupo y también de la Serie B de la LNFA.

No se dejó margen a la improvisación ni espacio a la fortuna, y sin embargo, ésta también estuvo presente y, en alguna ocasión, se decantó del lado de Voltors. El primer drive del partido supuso la primera opción de Cobras de avanzar yardas y la defensa de los mallorquines no puso las cosas fáciles. El objetivo era frustrar cualquier iniciativa del QB local Ángel Clemente: dificultarle el pase largo, impedirle correr con comodidad entre líneas o su habitual jugada de option. Con el temario aprendido, la defensa consiguió evitar que Clemente disfrutase en el campo y en un tres y fuera empezó el ataque de Voltors.

Las imprecisiones tomaron el control de Voltors y la contundencia del equipo de defensa no tuvo su reflejo en el ataque, a excepción de la primera jugada, en la que el QB Pedro Durán recorrió las 12 yardas que la línea de ataque fue asfaltando para facilitarle el avance. Casi que de buenas a primeras, un fumble cambió de nuevo la posesión otorgando la iniciativa a los locales que la defensa balear volvería a contener, y la dupla Rafa Estades y Luis Millón algo tuvo que ver. Aprovechando la obsesión de la defensa murciana con parar cualquier intento de carrera interior, Pedro Durán conectó un pase con Andrei Lossi que ganó la espalda a los linebackers y empezó a zigzaguear buscando la banda mientras que evitaba a safeties y cornerbacks. 60 yardas después Lossi entraba en la endzone abriendo el marcador con un touchdown que dedicaría a su hijo recién nacido. Juan Carlos Castilla hizo subir un punto más al marcador de los visitantes al colar entre los palos el chute del extra point.

Al poco de iniciar el segundo cuarto, precisamente el QB de Cobras, tras un laborioso asedio a la zona de anotación de Voltors, siguió la senda de sus líneas de ataque y con una carrera de pocas yardas logró subir 6 puntos al marcador local. Con 7-6 en el marcador, intentaron una conversión de 2 puntos que la defensa detuvo in extremis. Con este resultado se llegó al descanso. Muy igualados en el marcador, la segunda parte se planteaba como un nuevo partido pero de la mitad de duración en el que podía pasar cualquier cosa y en el que el prestigio de unos y otros estaba en liza. Victor Rodríguez, a pase de Pedro Durán, en primer lugar y Juan Carlos Castilla lograron ambos sendos touchdowns con los que se consiguió ampliar la distancia y ganar en tranquilidad.

El de Juan Carlos Castilla fue una jugada tan polémica como extraña: tras un punt en campo propio chutado por Castilla, él mismo consiguió, sin oposición de ningún adversario, detener la pelota 1 yarda antes de que saliese de la endzone murciana. Pese a que el balón estaba vivo (por haber tocado en un jugador de Cobras) ninguno de los jugadores locales se dieron por aludidos y decidieron dejar morir la jugada con la pelota fuera del campo. Sin embargo, el strong safety de Voltors y de la selección española no se rindió y al atrapar la pelota sumó el tercer touchdown para los mallorquines. Ninguno de los extra point pudieron ser convertidos por lo que el marcador era de 6-19. Pudiera parecer que el dominio de Voltors iba a hacer que el último cuarto fuese plácido, pero Cobras no se dieron por derrotados. Un tremendo hueco se abrió en la retaguardia de Voltors y el dorsal 17 cazó un pase de Clemente ante el que hizo inútil cualquier intento de reaccionar. Cobras se aferraban al partido con ese 12-19 y a falta de 7’39 para acabar el partido mantenían las posibilidades de empatar e incluso de ganar el partido con un touchdown.

Puntuar era vital para asegurar la victoria. La jugada se repetiría posteriormente: pase profundo de Clemente al receptor que gana la espalda y se queda totalmente solo ante el touchdown y la épica. De forma absolutamente incomprensible y en una acción que sólo se puede atribuir a la intervención de la suerte o de la diosa fortuna, al acomodarse el balón, éste sale disparado y Pedro Tomás, cornerback de Voltors, que le perseguía a sabiendas que no llegaría a tiempo del placaje, recoge el balón del suelo y avanza quince yardas antes de tirarse al suelo para asegurar la posesión en una jugada que se preveía un auténtico alboroto de incalculables consecuencias.

El destino tenía reservado un premio especial al joven debutante de 17 años Raúl Cernuda. Raúl tuvo la mala suerte de lesionarse a pocos días de iniciar la temporada el pasado mes de enero, cuando iba a debutar en el primer equipo de Voltors. Un esguince de rodilla le ha mantenido alejado de los terrenos de juego durante más de dos meses. El partido del domingo supuso su primera oportunidad con el equipo senior y no la desaprovechó. Un espectacular bloqueo -en el que le quitó el casco a su oponente del impacto- pusieron de manifiesto que este joven jugador es una rocosa promesa del fútbol americano de España.

A falta de 3’24 para acabar el partido, un balón largo de Pedro Durán se dirigía hacia el pilón derecho. Con excelente técnica, Raúl se deshizo de su defensor, capturó el balón, y poco le importó que tener a alguien enganchado en su pierna o que en su camino se interpusiera el safety rival. El camino más corto entre dos puntos para Raúl es la línea recta, caiga quien caiga. El #80 de Voltors -el mismo dorsal que el del mítico Jerry Rice, mejor receptor de todos los tiempos de la NFL- atropeyó a su oponente, que salió despedido, y entró en la endzone para marcar su primer touchdown el día de su debut, un touchdown que aportaba tranquilidad y una ventaja difícil de remontar para el equipo visitante. Juan Carlos Castilla volvió a convertir el extra point dejando el marcador en el definitivo 12-26.

Para conseguir el objetivo de acabar la fase regular imbatidos, el equipo ya trabaja en el próximo partido, que les enfrentará a Sueca Ricers en Son Moix el próximo domingo 30 de marzo. La victoria aseguraría matemáticamente el primer puesto de grupo, lo cual es la principal preocupación del club. La trascendencia de ese encuentro hace que Mallorca Voltors convoque a toda su afición a asistir al partido, a animar y a empujar al equipo hasta lo más alto para poder seguir disfrutando del fútbol americano en Palma durante el play-off.

Prensa Mallorca Voltors Foto: Óscar Quetglas