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Brillante triunfo del Sant Jordi en el terreno de juego del Portmany. Los verdinegros se han llevado el derbi y, de paso, dan un paso de gigante en su carrera hacia los puestos privilegiados de la clasificación. El plantel de Juanjo Cruz continúa imparable en el campeonato y ya suma 18 de 21 puntos posibles en las últimas siete jornadas.

Esta tarde, el conjunto de Can Guerxo ha sido muy superior al Portmany, que ha adolecido de la intensidad necesaria para ganar un partido de estas características. No así el conjunto jordier, que se puso por delante en el marcador en el minuto 5 gracias a un gol en propia puerta de Bonilla tras un remate de Jordi Serra, el mejor del encuentro. Los de Maymó no tiraron la toalla y buscaron el arco de Román, pero en la ocasión más clara, el larguero impidió que Moha empatara el choque.

El Sant Jordi, tras unos primeros 20 minutos intensos, bajó el pistón y el Portmany empezó a tocar el balón, pero sin generar demasiado peligro. Pero con lo que no contaban los visitantes fue con la expulsión de Mario Contreras. En el 35, el centrocampista fue amonestado por segunda vez tras una falta innecesaria y fue expulsado, dejando a su equipo en inferioridad. Hasta el final del primer acto, el cuadro de Las Salinas aguantó el tipo y buscó el contragolpe como solución de ataque, pero sin éxito.

Al Sant Jordi le tocó remar contracorriente en la segunda parte. Con uno menos, tiró de casta para aguantar el resultado ante un Portmany volcado, pero sin pegada. Sin embargo, el conjunto de Cruz no renunció al ataque y en el 60, Jordi Serra estableció el 0-2 para alegría de la afición verdinegra. El talentoso jugador conseguía un chicharrito que hundía a un Portmany con voluntad, pero sin chispa en los últimos metros.

El Sant Jordi se hizo fuerte en la zona ancha y los de Maymó no encontraron la manera de hincarle el diente a su presa. Los minutos pasaban y daba más sensación de peligro el conjunto visitante que el local.  Y en una acción de Cristian Valcárcel, hasta ese momento desaparecido, llegó la puntilla verdinegra. El interior puso patas arriba al bloque portmanyista en el 79 con un golito dedicado a su chica, Jessica.

El derbi se tiñó de verde. Los de Can Guerxo, con diez futbolistas sobre el campo, mandaban en San Antonio ante la resignación de la afición local, que, al menos, pudo celebrar un tanto, el de la honrilla, a dos minutos del final. Thierry maquilló el resultado de un partido que acabó con un rifirrafe entre Cristian Valcárcel y Moha que no fue a mayores.

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