Sports De Ca Nostra

Para el Mallorca todo ha cambiado. Aceptar, sin equivocarse, la nueva situación es obligación. Ahora este club, con todo su plantel y personal directivo, es equipo de Segunda División. Eso sí, no hay ni engaños ni excusas posibles. Sólo un objetivo válido en el horizonte; el ascenso. Y conviene no caer en la confusión. Para cumplir se tendrá que jugar bien al fútbol. Atacar con convicción y defender mejor.
Los rojos tendrán que batirse en cada partido con la vitola de favoritos. Pero sin trabajo no habrá éxito. La dirección deportiva del Club finalmente apostó por el método de José Luis Oltra. Él, deberá decidir con respecto a sus jugadores y aceptar la presión del ascenso. No hay dos entrenadores iguales y las diferencias con respecto a Caparrós y Manzano serán seguras.
El técnico valenciano ya nos ha enseñado algo de su decálogo táctico. Apuesta decidida por la conservación del esférico como concepto de ataque. Hasta en los entrenamientos casi todo se hará con el balón de por medio. Línea de cuatro zagueros con incorporación de lateral en banda fuerte de balón. Dos medios centros de perfil mixto. Uno más creativo con otro más luchador. Los jugadores exteriores buscando llegadas por fuera. Un jugador de referencia con una media punta moviéndose entre líneas y llegadas desde diferentes ángulos. Parece que aquellos ataques tan directos propuestos pasarán a mejor vida. ¿O no? Todavía es pronto para aventurarse. El tiempo y los partidos nos darán la respuesta.
De momento ante el Cambuur Leeuwarden pudimos ver combinaciones de ataques pausados con pases más profundos. Es decir, alternancia de juego corto con desplazamientos más largos.
Pero es en la organización defensiva en dónde se pudieron ver más diferencias. La presión alta de los rojos es una evidencia. Líneas adelantadas, bloqueando la salida del adversario, para recurrir al repliegue si no hay eficacia. Es una ocupación del campo con riesgo y que precisa de mucho automatismo. ¿Se conseguirá?
En el fútbol actual todas las acciones a balón parado son determinantes. En Segunda División más. En estrategia es más sencillo llevar jugadores y balón a zona de remate. Defenderlas y atacarlas con eficacia será una cuestión de pura supervivencia.
Jugadores a zonas asignadas combinadas con marcas al hombre parecen ser la apuesta de Oltra.
El Mallorca ha iniciado su andadura con cierto aroma de esperanza. La carrera es larga y el éxito es necesario. La evolución y la continuidad en la progresión del juego debe seguir aumentando. En cualquier caso la confección de la plantilla todavía no está cerrada. Falta saber cual será la nómina definitiva de altas y bajas en un equipo que huele, de momento, a ganador.
Tolo Ramon Entrenador