Tres cosas que el fútbol enseña y no todos aprenden

5 marzo 2013 | Por lorenzo | Categoria:

Cualquier persona que haya practicado el fútbol de una forma regular durante años ha tenido la posibilidad de aprender varias lecciones útiles para la vida.Muchas de estas lecciones pasan por delante y hasta que no pasa un tiempo no las vemos. Estoy seguro que no todos sacamos las mismas conclusiones pero aquí enumero 3.

#1 paciencia activa

En un deporte donde un individuo no depende de sí mismo es necesario tener paciencia y estar preparado para afrontar las situaciones que se pueden dar. Es normal que el jugador tenga la sensación de no encontrar su nivel o no le salen las cosas. En estos casos hay que tener paciencia activa, eso quiere decir que hay que seguir trabajando.Aunque parezca que el fútbol tiene una gran dosis de improvisación no es cierto.Cada acción acertada no es más que el resultado de la repetición durante entrenamientos que queda grabada en el subconsciente y sin pensarlas aparecen de forma intuitiva, cuando realmente es algo mecánico. Después hemos de tener en cuenta que cada jugador tiene un talento para unas cosa u otras, lo cual se ha de aprovechar para especializarse en lo que se sea mejor, aunque sea despejar balones, incluso eso se entrena (aunque no lo creáis).

“La inspiración existe, pero te tiene que encontrar trabajando” Pablo Picasso

#2 El individuo no es nada más que una pieza valiosa

Uno de los mayores retos de los técnicos es conseguir un grupo unido donde los ególatras no destruyan la armonía. A medida que se adquiere madurez el jugador va adquiriendo la capacidad de anteponer el bien común al personal que a la larga es lo mismo. Solo los futbolistas inteligentes son capaces de entender que dar no quiere decir perder, y no me refiero a darlo todo en el campo sino a dar lo mejor de si mismo a nivel humano en el grupo para de este modo aumentar el nivel de los compañeros y el propio. Un equipo es un conjunto de individuos remando por una misma causa, bueno, debería ser así pero el problema del fútbol es la exigencia de resultados a corto plazo y eso no permite eliminar la pequeña barrera de competitividad para convertirla en colaboración dentro del equipo.

Cuando el individuo se inserta en la sociedad se dará cuenta que no en todas las empresas o grupos existe ese nivel de trabajo en equipo. Lo más sencillo es adaptarse al estilo laboral pero creo que es una ventaja no olvidar lo que se aprende trabajando en equipo dentro del mundo del deporte.

#3 Fallar es parte del juego

En fútbol lo más común es fallar acciones del juego, tomar decisiones equivocadas. Frustrarse por fallar es de mentes débiles o de ilusos. Si fallar fuese algo que solo hacen los malos es para preocuparse pero los mejores jugadores fallan también pero se centran en volver a intentarlo pero un poco mejor que la vez anterior. Esos que parecen superdotados (del deporte) son los que más en serio se toman los entrenamientos para después en los partidos equivocarse menos. Los timoratos que dejan de intentarlo muestran una inocente inmadurez al no volver a intentarlo, eso les convierte en mediocres. Lo veo en los estudiantes notables en primaria que están acostumbrados a sacar buenas notas pero al sacar un resultado insatisfactorio pierden la confianza en sí mismos.

No hace falta ser un sabio para saber que la vida está compuesta de aciertos y errores. (Jacinto Ela)

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