Sports De Ca Nostra

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Hoy no es un día cualquier para el mallorquinismo. Se cumplen 97 años de la creación del club, originalmente bajo el nombre de Alfonso XIII. Fue en el número 8 de la Calle Armengol de Palma donde el 5 de marzo de 1916 se reunió por primera vez la Junta Directiva, que había aprobado días atras, el 27 de febrero, la constitución de un nuevo club de Football. Ese 5 de marzo se estrenó el campo de Buenos Aires, situado en lo que hoy es la Calle General Riera, con un partido amistoso entre el Alfonso XIII y su segundo equipo, el Victoria Eugenia. Ambos nombres correspondían a los monarcas españoles de aquella época, pues tal había sido el deseo del fundador de la sociedad, el perito agrónomo Adolfo Vázquez Humasque.

Adolfo Vázquez Humasque, nacido en Vilafranca del Penedés en 1887, hijo de un alferez gallego de la Guardia Civil y de una catalana, fue nombrado director de la Escuela Práctica de Agricultura de Baleares en marzo de 1912, a la edad de 25 años, tras una brillante carrera universitaria realizada en Madrid, ciudad a la que había sido destinado su padre, y en la que aprendió a amar las que serían sus dos grandes aficiones, los toros y el football.

Fue precisamente en el Coliseu Balear donde conoció al otorrino mallorquín Antoni Moner Giral, que durante sus estudios en Barcelona había practicado con éxito el fútbol, y que merodeaba habitualmente el velódromo de Tirador, situado en las afueras de la ciudad, a escasos metros de lo que hoy es el estadio Lluís Sitjar, y donde los pocos clubes que existían en Mallorca en la segunda década del Siglo XX practicaban como podían aquel incipiente deporte que había introducido en la isla José Oliver Bauzá, que junto a sus dos hijos Bartolomé y Zoilo había fundado en 1903 el primer club mallorquín de la historia, el desaparecido España. A éste le siguieron el Veloz Sport, el Regional y el Palmesano, y pronto empezaron a organizarse los primeros Campeonatos de Baleares, por supuesto sin reconocimiento oficial porque no existía la Federación Balear.

Adolfo Vázquez advirtió la necesidad de establecer algún tipo de organización para vertebrar a los siete equipos existentes, y le propuso a Antoni Moner convertirse en presidente de lo que denominó Asociación de Clubes de Football de Baleares. Resulta importante, en este punto de la historia, aclararos que en ese momento la intención de Adolfo Vázquez no era fundar ningún nuevo club, sino formar una especie de Federación bajo cuyo auspicio se diera cierto caracter oficial a las competiciones, así como proponer la creación de un campo de fútbol de dimensiones reglamentarias, porque las condiciones en las que se jugaban los partidos en el velódromo de Tirador eran deplorables.

Las conversaciones para la fundación de esa primitiva Federación se llevaron a cabo en el domicilio de Alberto Elvira, en el número 8 de la calle Armengol, donde rápidamente se formaron dos bandos. Uno, compuesto por Adolfo Vázquez y Antonio Moner, que defendían la necesidad de formar una Asociación Balear, y otro compuesto por dos directivos del Veloz Sport, la más poderosa sociedad deportiva de la época, que proponían solicitar el tutelaje de la Federación Catalana de Fútbol, por entonces ya en pleno funcionamiento. Tras muchas discusiones el 22 de enero de 1916 se constituyó la Asociación de Clubes de Baleares, presidida por Antoni Moner, con dos representantes de cada uno de los siete clubes fundadores (Veloz, Palmesano, Mahón, Luliano, Mallorquín, Pelayo y Cristina) en la directiva, y se acordó fijar la fecha del 25 de marzo para la inauguración del nuevo campo de fútbol que ya se estaba construyendo en una finca rústica situada  al oeste del velódromo de Tirador.

Sin embargo poco iba a durar aquella Asociación de Clubes, de la que se separó pocas semanas más tarde el Veloz Sport, al que siguieron otros de sus fundadores. Las deserciones fueron la gota que colmó el vaso de la paciencia de Adolfo Vázquez Humasque, que decidió coger al toro por los cuernos y sustutuir su idea original por otra mucho más ambiciosa, la creación de su propio club de fútbol. Así nació el Alfonso XIII, cuya fundación se acordó el 27 de febrero de 1916 en la misma Calle Armengol, donde no sólo surgió un equipo, sino varios, porque la iniciativa de Adolfo Vázquez había sido acogida con entusiasmo por muchos futbolistas de la época, entre ellos varios del Veloz Sport, y fue necesario formar varias escuadras diferentes para darles cabida a todos. Así aparecieron el Victoria Eugenia y el Progreso, pero sin duda hubo otros más.

El 5 de marzo de 1916 dos de esos equipos, el Alfonxo XIII y el Victoria Eugenia, se enfrentaron entre sí en un partido amistoso celebrado con motivo de la inauguración del campo de Buenos Aires, un terreno que el Conde de Ribas había cedido a Adolfo Vázquez por un módico precio de alquiler, y que sería, hasta 1945, el hogar del club de fútbol que, con el tiempo, se convertiría en el blasón deportivo del archipiélago balear. Había nacido el actual Real Club Deportivo Mallorca, al que hoy felicitamos en su 97 aniversario. Aunque está lleno de achaques y ha superado crisis muy graves a lo largo de su historia está ya muy cercano a convertirse en Centenario. El deseo de todos, por supuesto, es que lo celebre siendo equipo de Primera División.