EL POLICÍA NACIONAL QUE AGREDIÓ AL ÁRBITRO HÉCTOR GINER «TENÍA PROBLEMAS Y SE LE FUE LA CABEZA»
20 febrero 2013 | Por lorenzo | Categoria: Arbitros
El policía nacional que el pasado domingo agredió presuntamente al joven árbitro Héctor Giner -de tan sólo 17 años y que perdió el bazo como consecuencia de los golpe recibidos-, le confesó al presidente del club en el que militaba, el Mislata UF, que tenía problemas familiares y que se le fue la cabeza en la jugada, aunque según José Asensio, presidente de la entidad, mostró en todo momento su arrepentimiento por su «deleznable acción». El agente A. M M. fue expulsado inmediatamente por su club, mientras que la Jefatura Superior de la Policía Nacional de Valencia ha iniciado el proceso para suspender de empleo y sueldo al agente.«Nuestra decisión de apartarlo del equipo ha sido radical», aseguró ayer José Asensio, presidente del Mislata UF, quien asegura que en el club todavía no salen de su asombro por la acción de su ya exjugador. Asensio explicó que «no había indicios del comportamiento agresivo» del jugador, que jugaba de medio centro defensivo. «A. M. M. siempre se había comportado de manera afable y parecía muy tranquilo. Provenía de Salamanca, de la federación salmantina. Llegó al club por mediación de otro policía nacional compañero en el club. Como no lo conocíamos, lo tuvimos dos meses de prueba antes de hacerle la ficha. Vimos que era lo más adecuado y es como solemos proceder con este tipo de casos. Durante la pretemporada y los 21 partidos de liga no nos ha dado ningún problema hasta el pasado domingo», explicó el máximo responsable de una de las tres escuelas de fútbol que actualmente hay en Mislata.
Anteriormente A, M. M. jugó en una liga de aficionados no federados en Salamanca en un equipo llamado Bar Paco. Los compañeros de A. M. M. le reconocieron ayer vieron las imágenes por televisión y explicaron que su comportamiento en el campo nunca fue problemático.
Mientras, José Asensio insiste en que nada hacía indicar que era un jugador agresivo. «Lo más chocante es que no había sido expulsado en toda la campaña y ni siquiera había cumplido el ciclo de amonestaciones. Tenía solo una tarjeta». «Su acción fue deleznable y sus compañeros son los primeros que rechazaron su comportamiento», asegura el presidente del Mislata UF, quien desveló que tuvo una conversación telefónica con el jugador donde le comunicó que no seguía en el club pese a su arrepentimiento: «Yo hablé con él telefónicamente y me confesó que tenía problemas personales y que se le había ido la cabeza, pero eso no justifica nada. Él mostró su arrepentimiento total, se echó a llorar tras la acción y quería entrar al vestuario del club rival para pedir perdón. Quiso disculparse con el árbitro y dio la sensación de estar realmente jodido». Fuentes del entorno del policía aseguraron ayer a este diario que se encuentra «arrepentido y derrotado» por lo sucedido.Por otra parte, el Twitter oficial de la Policía Nacional censuró ayer su comportamiento: «El funcionario que golpeó a un árbitro ha sido expedientado y será apartado de la Policía. Una actitud inadmisible en nadie y menos en el Cuerpo Nacional de Policía». INFORMACION.ES